CCOO nos hemos vuelto a concentrar contra la privatización de los canales del Ebro, esta vez en Monzón (Huesca), y exigir más empleo público y de calidad
Decenas de delegadas y delegados del SAE de la FSC-CCOO en Aragón nos concentramos ayer contra la privatización de los canales de Lodosa, Imperial y Aragón-Cataluña, ante las oficinas de la Confederación Hidrográfica del Ebro -CHE- en Monzón, Huesca, continuando con las movilizaciones que iniciamos en enero en Zaragoza.
CCOO nos mostramos una vez más en contra del modelo que el Ministerio para la Transición Ecológica y
Reto Demográfico (MITERD) y la CHE proponen para la gestión del agua -bien público y de todas y todos- encomendando su gestión a las comunidades de regantes y que hasta la fecha venían realizando empleadas y empleados públicos.
Este planteamiento aleja la gestión del agua de la
ciudadanía, y deja su uso en manos de criterios empresariales y economicistas, en lugar
de mantenerse como un servicio público dirigido hacia el interés
general. CCOO insistimos en que, lejos de convertirse en una solución, la
privatización generará nuevos problemas, tanto en el reparto del agua entre los propios regantes, así como en la calidad de la misma.
CCOO entendemos que el agua, como bien de todas y todos, no puede quedar en manos de entidades privadas -cuyos órganos se rigen en función de la superficie de riego, y que al final acaban subcontratando la gestión del agua con terceros- y consideramos imprescindible garantizar su gestión pública mediante la incorporación de más personal en las confederaciones hidrográficas, y en concreto en la CHE, donde desde 2007 se ha perdido un 25% de la plantilla.
CCOO también hemos exigido en la concentración, una solución para el mal encuadramiento del personal laboral de vigilancia de canales, tras más de
veinte años desarrollando funciones no reconocidas y no remuneradas,
cuando se trata de un servicio fundamental, que incluso se declaró como
esencial durante la pandemia, colectivo numeroso en la provincia de Huesca.
CCOO llevamos más de dos meses pidiendo una reunión con Teresa Ribera, ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico para abordar la situación, y hoy mismo hemos vuelto a reiterar la necesidad de la misma, en el convencimiento de que la gestión del agua tiene que seguir siendo pública.